La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC) repudió este miércoles en Miami el envío por las redes sociales de una carta “falsa” escrita supuestamente por el disidente cubano Guillermo Fariñas en contra de opositores en Cuba y el exterior.
Juan Antonio Blanco, director la FHRC, dijo que es un “intento de dividir” a la oposición de la Policía Política de Cuba y de “crear un rencor contra ‘Coco’ Fariñas para que no lo apoyen en la huelga de hambre” que lleva a cabo desde hace dos semanas.
Blanco señaló que la carta, en la que se “descalifica a opositores”, fue recibida por uno de los representantes del disidente en Miami (Florida), que la divulgó en algunos medios de la oposición, pero después la retiró al comprobar que era falsa.
Blanco explicó que él y varios miembros del exilio cubano se comunicaron hoy con el opositor en huelga de hambre, quien desmintió la misiva en su totalidad al señalar que es “un invento de la Policía Política” y “una maniobra para dividir a la oposición en torno a la huelga de hambre”.
Entre los opositores también estuvo el expreso político José Daniel Ferrer, quien desde el principio consideró sospechoso el texto, según explicó Blanco.
La carta, recibida por Rafael Vilches a través de su cuenta en Facebook y atribuida a Fariñas, está fechada el 1 de agosto y se va contra los “falsos patriotas”.
En ella cuestiona la inclusión de “falsos opositores” entre los organizadores del II Encuentro Nacional Cubano, que, dice, se llevará a cabo en San Juan (Puerto Rico), del 12 al 14 de agosto.
“Él puede tener discrepancias con personas, pero no va a ofender a nadie”, agregó Blanco, quien dijo que la cuenta de Facebook, al parecer, fue atacada por un “hacker”.
El expreso político, coordinador del Frente Antitotalitario Unido (FANTU), está en huelga de hambre desde el pasado 19 de julio.
Fariñas, distinguido por la Eurocámara en 2010 con el Premio Sájarov por la defensa de los derechos humanos, demanda al Gobierno el cese de la represión contra los disidentes y un diálogo con la oposición.
El opositor acumula desde 1995 un historial de más de 20 huelgas de hambre.