Durante los últimos años, cada enero en el Día de los Reyes Magos, las Damas de Blanco, junto con otros grupos de derechos humanos en Cuba, reúnen a niños y sus familias para repartir regalos y merienda como una forma de proporcionar esperanza y «una luz en un lugar oscuro». Lamentablemente, durante el evento de este año , la Seguridad del Estado y la policía política vandalizaron la sede de las Damas de Blanco y confiscaron los juguetes , dejando a muchos niños sin un regalo. La mayoría de los niños que se quedaron sin nada para jugar este año fueron los propios hijos de las de las Damas de Blanco, que se sacrificaron para que otros niños del vecindario pudieran recibir una pequeña ofrenda.
Afortunadamente, el «engaño» funcionó, y 20 niños se presentaron con sus madres a recibir los juguetes que no se les pudo entregar en enero. Las madres que se presentaron sin sus hijos también se les dio regalos para llevar a sus hogares con el proposito de que cada niño del grupo pudiera disfrutar de la semana de vacaciones con algo nuevo para jugar, y ademas algo para mantener en sus corazones … un acto desinteresado puede ser recompensado.