El embargo de Estados Unidos es contra el estado cubano. El bloqueo del gobierno cubano es contra el pueblo.
La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC) denuncia y condena el verdadero bloqueo a la prosperidad del pueblo cubano -que no es el embargo de Estados Unidos al estado castrista sino las barreras estatales internas al talento y la iniciativa ciudadana- y exige su inmediato levantamiento.
El mercado estadounidense está hoy al alcance de aquellas empresas cubanas que demuestren ser elegibles para ser autorizadas a sostener relaciones comerciales y financieras con Estados Unidos por su naturaleza genuinamente privada.
Poner fin al bloqueo interno conduciría en muy breve plazo al bienestar general por medio de la creación de empleos y el crecimiento de la producción de bienes, productos y servicios. El gobierno cubano debe levantar esas barreras y establecer un nuevo régimen económico. Es hora de legalizar la existencia de un genuino sector privado y campesino, lo que en muy breve tiempo repercutirá de manera positiva en la vida cotidiana del cubano.
Ello supone, entre otras cosas, las siguientes condiciones:
1- Levantar todas las restricciones a los cubanos, sea cual sea su lugar de residencia, para participar a plenitud en todos los sectores de la economía y prestación de servicios del país y retirar todas las restricciones a los profesionales cubanos para que ejerzan sus conocimientos en cualquier campo del sector privado.
2- Liberar el acceso a Internet con calidad y en forma económica para todos los cubanos.
3- Permitir el registro legal de los negocios cubanos para que cuenten con la necesaria personería jurídica que les permita a sus propietarios proteger sus intereses. Autorizar el establecimiento de cámaras de comercio privadas, la contratación libre y colectiva y el establecimiento de asociaciones gremiales, de propietarios y sindicatos independientes
4- Permitir el comercio directo de exportación e importación del sector privado cubano así como las inversiones directas de capital extranjero en dicho sector.
5- Eliminar las empresas intermediarias estatales para la contratación de fuerza laboral cubana y autorizar a la inversión extranjera para que contrate, pague y despida de manera directa a sus empleados..
6- Permitir la inversión internacional directa con el sector privado. Autorizar la creación de mecanismos bancarios y financieros privados para canalizar estas actividades. Establecer la plena circulación del dólar estadunidense o del Euro hasta que sea factible unificar el sistema en una sola moneda.
7- Establecer la separación e independencia de los poderes legislativo y judicial por las garantías que tienen que ofrecer a la actividad económica.
8- Eliminar todo tipo de discriminación laboral por razones ideológicas, de raza, sexo, género, o religión y decretar la proscripción nacional de toda violencia basada en esos criterios de odio y exclusión, así como la amnistía de quienes hasta ahora guardan prisión por algunos de esos motivos.
9- Garantizar que toda privatización de empresas estatales se haga con transparencia y según normas de derecho internacional para impedir toda piñata y favoritismo favorable a los actuales funcionarios del estado y el partido.
Todas las anteriores exigencias son permitidas por el embargo de Estados Unidos, pero no por el bloqueo interno del gobierno cubano a las iniciativas ciudadanas.
¡Apoyamos al pueblo en su derecho a alcanzar la prosperidad con libertad!